Me encanta salir las mañanas, más si hace un mañana soleada y aprovechas para recorrer la feria del libro, ver una maravillosa exposición de pintura y tomar un par de mostos con sus respectivas tapas...
Sendo
El futuro a la espalda
Situado en un enclave que lo cruzan caminos históricos como la vía romana, la Cañada Real y el Camino de Santiago; veo el monte Teleno, ahora coronado por calvarios que se mueven con el viento, que cada día despide al sol por el Oeste. Al norte veo el manantial de las ventiscas, al Sur los nubarrones y aguaceros, y por el este veo al sol que sale deslumbrando al viajero.
El futuro a la espalda
Situado en un enclave que lo cruzan caminos históricos como la vía romana, la Cañada Real y el Camino de Santiago; veo el monte Teleno, ahora coronado por calvarios que se mueven con el viento, que cada día despide al sol por el Oeste. Al norte veo el manantial de las ventiscas, al Sur los nubarrones y aguaceros, y por el este veo al sol que sale deslumbrando al viajero.
Por el Este, antes de pestañar el alba, el Caminante, con la mirada fija a un par de metros del suelo, levantándola de vez en cuando para no perder el horizonte; paso a paso y morral al hombro va diseminando pensamientos, reciclando vivencias, desviando las adversidades para absorber todos los aromas que a lo largo de los siglos, otros como él, han ido vertiendo por la veredas.
Por el Este, un hombre solo, paso a paso se adueña del camino imperturbable al tiempo siguiendo los colores de cada estación, o escuchando el sonido del deshielo.
Un hombre solo, con el futuro a la espalda, va siguiendo la senda del orín y los cencerros, intenta escuchar la algarada de los romeros, el eco de las campanas de la catedral o de la iglesia de cualquier pueblo. Un caminante con un embalaje de recuerdos y maleta a la espalda cruza regatos y senderos, atraviesa el páramo abrasado de colores austeros.
Son Caminantes que desconozco su procedencia y destino, vienen de muy lejos, vagan en silencio, solo el movimiento de su silueta me habla y me dice que el futuro no está en “sus manos”; el futuro y el pasado lo acumula en su espalda. El presente está en sus pies, en su bastón y en su mirada con la cual me identifico.
Sendo noviembre de 2008
Cómo me gusta vivir en León!
Sonríe y Sueña
Olly
Sonríe y Sueña
Olly
totalmente de acuerdo con ese tipo de días..
ResponderEliminary, sí, León promete!!!!
besos
Me alegra que ya disfrutes de lo que te rodea...León es especial!!
ResponderEliminarxoxowapa
Yo también disfruto mucho de este tipo de días. Me alegro de que lo pases bien!
ResponderEliminarMuxus dsd Bilbao
Ahora estoy pendiente de ir a la exposición de pinturas del museo de Bellas Artes de Sevilla q estan expuestos los cuadros de la casa de Alba, una maravilla!, y seguramente haré como tu, un vinito y un paseito.
ResponderEliminarBesitos.
Me alegro q estes feliz en León.
Cuando hace sol, apetece todo...
ResponderEliminarMe estoy planteando lo de ir a Leon...creo que no queda tan lejos ;)...todo el mundo me lo recomienda ultimamente...
Bss!!!
cuánto me alegro de que ya estés disfrutando de la ciudad!, y muy guapa, con la falda de flores y esos leggings morados, ahí al lado del puente de San Marcos!
ResponderEliminarbesos y suerte
pues sí, hay mañanas en las que apetece más ir a pasear que a trabajar :))))
ResponderEliminarAins es que esos mañanas soleadítas son geniales para pasear y disfrutar del dia.
ResponderEliminar:D
Cuanto me alegro de que estés tan contenta en León!!
ResponderEliminarUn beso muy fuerte guapa!! y a disfrutar del finde!
Qué imágenes más bonitas!! Bss
ResponderEliminarFeria del libro, tapitas, pintura...
ResponderEliminarque buen plan! me apunto!
Un beso!
Ay nena que llevo atraso de blog. Me alegra ver que estas adaptandote bien a León.
ResponderEliminarEsas mañana de domingo son geniales.
Besitos.